¿Qué son las energías renovables?
Las energías renovables son las fuentes naturales de energía que tienen la capacidad de renovarse por medios naturales, por lo cual son virtualmente inagotables.
Entre las energías renovables eléctricas encontramos la energía solar, que aprovecha la luz y el calor del sol, la eólica, que aprovecha el movimiento del viento, la hidráulica o hidroeléctrica, que aprovecha las corrientes de agua, la geotermia, que aprovecha el calor interior de la tierra, la mareomotriz, que aprovecha el movimiento de las mareas o la undimotriz que aprovecha el movimiento de las olas. Asimismo, también se considera renovable la energía que se obtiene a partir de la materia orgánica o biomasa (madera u otra materia vegetal sólida o la materia de los residuos urbanos).
Retos tecnológicos asociados a las energías renovables
Cada una de las fuentes de energía de origen renovable afronta retos tecnológicos concretos. En general, se busca superar la eficiencia energética en el proceso de transformar el recurso natural en energía disponible para ser usada.
Sin embargo, el principal reto está relacionado con la variabilidad y la intermitencia en la generación de electricidad renovable, en particular la eólica y la solar fotovoltaica, ya que es difícil predecir la disponibilidad y constancia del viento y el sol. Otro problema es la volatilidad de la demanda, pues los mayores niveles de consumo se dan cuando el sol está poco disponible y los menores niveles de consumo cuando el viento está en el máximo de su disponibilidad.
¿Cómo se soluciona la intermitencia en la generación eléctrica de origen renovable?
La propia intermitencia de la generación eólica y solar, sumado a la dificultad de predicción, obligan a disponer de un sistema de generación de respaldo, que en la mayoría de los casos es de componente térmico.
Posibilidades tecnológicas como el almacenamiento de electricidad a gran escala o la captura, almacenamiento y uso de carbono (CCUS) todavía no están suficientemente desarrolladas como para ofrecer las soluciones requeridas hoy en día.
Gracias a la penetración de las tecnologías digitales en el sector energético y a la evolución de sistemas de generación distribuida con energía fotovoltaica (las comunidades energéticas), en los próximos años se espera un cambio radical en la participación de los consumidores y su potencial como elementos clave para la flexibilidad de los mercados, con nuevas figuras como los agregadores de demanda.
Las energías renovables son las fuentes naturales de energía que tienen la capacidad de renovarse por medios naturales, por lo cual son virtualmente inagotables. Entre las energías renovables eléctricas encontramos la energía solar, la eólica, la hidráulica o hidroeléctrica, la geotermia, la mareomotriz o la undimotriz.
Situación y perspectivas del almacenamiento energético
El almacenamiento energético se presenta como el principal mecanismo para solucionar la intermitencia de la generación renovable y la incongruencia entre el consumo y la disponibilidad de los recursos renovables. En particular, si hablamos de electricidad, actualmente es muy difícil almacenarla en grandes cantidades y, además, con la restricción de que el consumo y la generación deben estar en permanente equilibrio.
Gracias a la innovación, en los próximos años se espera un desarrollo acelerado de las nuevas tecnologías, así como de modelos de negocio ligados al almacenamiento energético y la gestión flexible de la energía, lo cual maximizará la integración de la generación renovable.
En los últimos años, el almacenamiento energético ha incrementado considerablemente su capacidad instalada, si bien a nivel global los ritmos de despliegue no han seguido creciendo tanto como la generación renovable. Para su despliegue y desarrollo es necesario un marco regulatorio estable y claro, que sitúe la flexibilidad -y no necesariamente tecnologías individuales– en el centro del diseño de las políticas. Flexibilidad en la operación de un sistema eléctrico cada vez más descentralizado, que puede ser ofrecida por la demanda, la generación y el almacenamiento, optimizando el uso de los recursos energéticos.
El hidrógeno como alternativa de almacenamiento de energía renovable
Importancia de las energías renovables a nivel global
Durante los últimos años hemos observado como el mix energético ha experimentado un cambiado significativo, principalmente debido a los compromisos ambientales adquiridos por los distintos países. Si hace un tiempo las energías renovables contribuían relativamente poco al mix, hoy se están consolidando como fuentes de energía fundamentales para la transición energética, substituyendo progresivamente a los combustibles fósiles en la generación de electricidad. Su fuerte penetración se explica gracias a los avances tecnológicos y los distintos mecanismos de apoyo impulsados desde principios de los años noventa.
Importancia de las energías renovables en España
En los últimos diez años, las energías renovables han contribuido al mix eléctrico del país en un 37% de promedio y en 2020 alcanzaron un máximo histórico del 44%.
Esta notable participación se debe a una potencia, o capacidad de generación instalada, del 54%. Gracias a condiciones climatológicas favorables y al aumento de la potencia instalada, la energía solar fotovoltaica, la hidráulica y la eólica han permitido incrementar estas cifras en los últimos años.
¿Cuál es la visión a futuro para las renovables en España?
El futuro de las energías renovables en España es claro y optimista y se prevé una mayor presencia en el conjunto del sector energético. Esta visión se enmarca en el actual proceso de transición energética hacia una economía descarbonizada y gracias a que el país goza de recursos suficientes para conseguirlo.
En esta línea, el país busca llegar a 2050 totalmente neutro en carbono, lo que implicaría tener un sector eléctrico 100% renovable.