Autor
Tomás Gómez-Acebo Temes
Profesor de la Escuela de Ingeniería TECNUN-Universidad de Navarra y Director de la Cátedra de Transición Energética Fundación Repsol en Universidad de Navarra.
Autor
Ane Arrillaga García
Estudiante en la Universidad de Navarra.
Los portadores de hidrógeno pueden ser una solución tecnológica para reducir su volumen y abaratar costes.
El transporte y almacenamiento de hidrógeno son desafíos clave en la transición hacia energías más limpias. Aquí es donde el amoniaco y el metanol emergen como soluciones destacadas. Ambos compuestos cuentan con infraestructuras maduras y desempeñan un papel crucial en la economía del hidrógeno.
Esta publicación analiza el potencial de estas opciones de transporte de hidrógeno.
¿Qué propiedades tienen estos portadores?
- ⚗️ Amoniaco: Producido mediante el proceso Haber-Bosch, ofrece una densidad de hidrógeno alta y es utilizado como combustible en motores marítimos. Sin embargo, plantea retos por su toxicidad y la necesidad de controlar las emisiones de NOx.
- 🌱 Metanol: Líquido a temperatura ambiente, lo que simplifica su transporte y almacenamiento. Su versión "verde", obtenida a partir de CO₂ capturado, destaca como una opción sostenible.
Comparativa: Amoniaco vs. Metanol | Amoniaco (NH3) | Metanol (CH3OH) |
Estado físico | Gas (requiere refrigeración) | Líquido a temperatura ambiente |
Contenido de hidrógeno | Mayor | Menor |
Sostenibilidad | Emisiones de NOx | "Verde" si deriva de CO₂ |
Infraestructura | Requiere alta inversión | Adaptación más sencilla |
Toxicidad | Alta | Baja |
Aplicaciones clave
Ambos compuestos se están utilizando como combustibles alternativos en motores marítimos, contribuyendo a la descarbonización del sector. Aunque su potencia calorífica es menor que la del diésel, ayudan a la descarbonización del transporte marítimo.
En términos de transporte, el metanol presenta una ventaja logística al ser más fácil de manejar. Sin embargo, el amoniaco, gracias a su mayor contenido de hidrógeno, podría ser clave en aplicaciones que demanden grandes cantidades de este gas.
Alternativas en el corto, medio y largo plazo.
Aunque ambos compuestos tienen limitaciones, su uso complementario puede facilitar la transición energética. Mientras el metanol verde ofrece soluciones inmediatas, el amoniaco podría liderar en aplicaciones a mayor escala en el futuro.
Si quieres conocer más sobre cómo el amoníaco y el metanol pueden ser soluciones para transportar el hidrógeno, puedes descargar el documento adjunto.
